REVELACIONES ( 17 ) EL REGALO A ESTA HUMANIDAD

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Les regalo ahora parte del conocimiento del plan de salvación que ha venido cumpliéndose y será completado en su momento.

Era necesario como preparación del hombre, sensibilizarlo en su humanidad divina y despertar su consciencia, en relación con su Dios creador.

Por eso en todas las culturas en la tierra, se preparó esa sensibilización mediante "hijos de hombre", que por inspiración divina fueron guiados para infundir en su pueblo y región una forma de vida impregnada en el amor y la buena obra.

Estos son los conocidos como avatares e iluminados, fue tan perfecta su inspiración y su obra que casi todos ellos fueron y son considerados como Dios en el género humano de la región que habitaron.

A cada uno le fue revelado el origen del mundo y la humanidad, su historia y su padecer y el conocimiento del hijo de Dios que tendría que venir para la salvación de todos los hombres.

Cada uno en su cultura, explicó esto de la mejor manera comprendida y dio los nombres que correspondían en su lengua, buscando la palabra más acorde al significado de su esencia.

En todas estas religiones que centran su deidad en uno, si las estudian y analizan de buen modo y profundamente, descubrirán lo que no han querido aceptar aún: "todos son hijos del mismo Dios, del mismo verbo, de la misma voluntad", "todos son hermanos entre sí".

Sólo el que vaya aceptando y haciendo vida esta verdad, vivirá en resonancia crística conmigo.

En toda cultura se anunció y quedó escrito en sus libros sagrados, en sus muros, en sus pirámides cómo había sido y seguiría siendo lo necesario a suceder y cumplirse, para estar atentos y ayudar al plan.

Así, en todas, se anuncia y se reconoce que había que destruir las confusiones y errores que crearon las tinieblas, los rebeldes, los demonios, los ángeles caídos, llámenles como así quieran, ellos son también mis hijos, los que tendrían que ser vencidos y que sólo un hijo de Dios tendría el poder necesario para lograr este cometido:

Uno luz de luz, uno en la naturaleza del padre, pero que al mismo tiempo tendría que vivir el ser hombre para poder alcanzar a la muerte y desde ahí realizar el plan de la salvación y redención.

Por ello en el plan del Pueblo de Israel se anunciala venida del unigénito del padre, que tendría que encarnarse para la salvación de la humanidad.

Y así fue cumplido por mi divino hijo: "Jesús el Cristo", engendrándose en María, a quien algunas religiones conocen como la virgen Maria , El unigénito de Dios tendría que engendrarse, nacer y habitar entre los hombres para poder vivir la muerte y desde ahí tener el poder de romper y destruir con su resurrección y su ascensión al reino, todas las ataduras y barreras impuestas por los hijos rebeldes.

Estas barreras fueron en todos los planos: físico, mental, cósmico y espiritual para lograr así esclavizar al hombre y separarlo de su Creador.

El Cristo sería el único con el poder de restituir el orden en el plan y dar el triunfo definitivo a mis hijos de luz.

Es llamado por todos el unigénito porque ha sido y será el único engendrado por Dios Padre en el mundo y nacido de mujer.

El único que no pasó por el olvido y siempre tuvo presente su naturaleza divina, su procedencia divina y su misión sagrada.

Jesús eligió su misión, como siempre en mi corazón ha estado su salvación, mío fue el placer de enviar a mi hijo cuando fue llegado el tiempo.

Ahora es menester que sepan que de él fue el deseo de tomar esta dolorosa misión por el amor que me tiene a mí como el padre y a ustedes como sus hermanos.

Él, por su amor infinito, incondicional e impersonal,"el amor crístico universal", vino a ser y a hacer cumplir todo lo necesario para poder salvar a la humanidad.

Vino a servir por su amor, para gloria del padre.

Jesucristo cuando amó venir, sabía que la humanidad no lo merecía, ni lo reconocería; sabía que no iban a escucharlo, ni a entenderlo, aún más, sabía cual tendría que ser su pasión y su muerte y así, amó venir.

Aún hoy algunos lo siguen negando, pero no por eso su misión no fue cumplida en perfección; es por ello que en el último momento de su vida humana, a pesar del inigualable e incomprensible dolor que padecía por la humanidad, su grito triunfal fue:

"consumado es".

Como Jesús, sean Cristos vivos, Jesucristo vino a enseñarles con su vida cómo vivir su humanidad para que sea ésta, divina.

Él vino a mostrar el camino, a hablar la verdad y a entregarles la posibilidad de vida eterna.Vino a entregarles el reino de los cielos para que, el que así lo quiera lo viva, siguiéndolo a ÉL aquí en la tierra.

El Cristo es el más grande ejemplo de amor que se pueda entregar a la humanidad, es por ello que hoy la voz de su propio corazón habla a su conciencia y les reclama que dejen de lado su tibieza, que sea su voluntad la que se defina.

Es esencial para este tiempo que cada uno lo reconozcay lo acepte en su vida como la parte culminante de su propia religión o creencia.Es menester que a cada uno se le respete el nombre del camino que haya elegido para el encuentro con su Padre Dios, pero también que todos se reconozcan crísticos en Él, siendo Cristos vivos en el amor impersonal, infinito e incondicional con sus hermanos.Sean entonces, uno en mí.

Mi amadísimo hijo, al ofrecer su vida en la cruz, rasgó literalmente las barreras que separaban a la tierra de los cielos hasta abrir el camino al reino.

Es esencial que reconozcan esto porque así podrán comprender que una obra de esta magnitud o envergadura no fue hecha para unos cuantos, esta obra salvadora es para la que ha sido, es y será la humanidad.

Su crucifixión conjuntó a la tierra y los cielos en un centro: Él.

Como el Gran Maestro que les enseñó con su muerte, no sólo el gran amor por el Padre, sino también que en la vida hay que morir a lo humano para renacer a lo divino.