Es difícil imaginar como sería mi vida si no tuviese un amigo como tu. Siempre compartiendo todo y eso ha hecho de mi una persona más fuerte. Se que pocos hijos o hijas en el mundo pueden tener un padre amigo, por eso se valorar nuestra amistad.
Cada vez que te necesité, estuviste a mi lado, apoyándome y ofreciéndome tu amor incondicional. Y cuando me sentía feliz sabía que podía celebrar mi victoria contigo, pues ¡mis conquistas también eran tuyas!
Contar con los consejos sabios de un amigo como tu que solo quiere lo mejor para mi y mi felicidad es un privilegio concedido por Dios. Y tu todavía tuviste paciencia en los momentos en los que yo no te quise oír. Y cuando volvía a tus brazos, arrepentida siempre estabas dispuesto a perdonar y conversar sobre ello.
Espero poder compensar esta amistad, especialmente ahora que estás envejeciendo. Se que ahora algunas tareas que podrían parecer simples, se vuelven complicadas. Por eso estaré siempre a tu lado para ayudarte de la misma manera que tu has hecho conmigo durante todos estos años.
Me siento orgullosa de poder decir a mis amigos, ¡mi padre es también mi mejor amigo!
Como conclusión final aprenderemos que nuestro verdadero tesoro a veces está mucho más cerca de lo que imaginamos, por eso cuesta tanto verlo, Papá, Nunca desistas de tus sueños. Sigue las señales y aunque creas por un momento que yo no estoy mas por aqui cerca, est5are siempre ahi, en el centro de tu ser.
Con amor, Ro
